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+ U.D.O. + BLOOODHUNTER+ WINTERSUN + HITTEN + LEO JIMÉNEZ + GRAVEYARD + THE BROKEN HORIZON + BLAZE BAYLEY + THYRANT + ARKONA
Jueves 13, Viernes 14 y Sábado 15 de Junio de 2019 – Fuengirola – Málaga
Viernes 14 – Primera Parte
ARKONA
Los folkies rusos ARKONA fueron los encargados de dar el pistoletazo de salida a la primera edición del festival ROCK THE COAST, en el escenario principal de la izquierda, llamándolo con el nombre estándar Main Stage 1.
No sin antes comprobar las magníficas instalaciones del Mare Nostrum Park de Fuengirola, con unos escenarios gigantescos a escasos metros de la playa (el de la derecha se instalaría excepcionalmente para la ocasión), varias barras repartidas por el recinto, sombras para paliar las horas de sol más dañinas de la tarde, puestos de comida, puesto de merchandising oficial, mercadillo, una enorme grada dispuesta enfrente de los escenarios para el disfrute y descanso del personal, además de un tercer escenario dentro del Castillo de Sohail cuya construcción data del Siglo X, a unos cuarenta metros por encima del nivel del mar, algo que hizo que, más las subidas que las bajadas, fueran al final del día una proeza a realizar.
El festival apostó por no usar moneda propia del festival, algo que cada vez más se está implantando en nuestro país, y que en el resto de Europa tienen más que por mano. En su lugar se utilizaron unas pulseras recargables para pagar con el sistema NFC (por contacto) como la mayoría de tarjetas bancarias, algo más que cómodo para los asistentes.
Durante todo el viernes haría una temperatura más que agradable, con unos 25 grados durante el día, con un sol que no acabó de quemar ninguna piel, aunque por la noche las temperaturas bajaran considerablemente habiendo que tirar de manga larga, algo que cogió por sorpresa a más de uno/a.
Como digo, los rusos ARKONA con la enérgica Masha al frente, saltaron a escena sobre las dos y cuarto de la tarde y con el sol de cara ante no mucho público, ya que se formó una buena cola para entrar al recinto, para atacar con su folk metal de raíces eslavas, luchando contra un viento cada vez más violento, algo que pareció no importarles ni inmutarse, cómo buenos rusos que son!
Ataviados con roídos ropajes marrones, esta vez sin pieles de por medio (algo han aprendido de su anterior visita al LEYENDAS DEL ROCK) y su característico logo proyectado en la gran pantalla trasera de leds, ARKONA visitaban Fuengirola con Khram como último disco de estudio.
La rubia Masha llevó el peso de la actuación tal y cómo nos tiene acostumbrados con una energía descomunal y una actitud envidiable. Para ella, todos sus shows son autenticas batallas y su banda sonora, temas de la talla de Shtorm, que no acabó de sonar todo lo nítida que debería, su buque insignia Goi, rode, goi!, o las festivas Stenka na Stenku y Yarilo que hicieron saltar y bailar a ya un más que nutrido público al más puro FINNTROLL, aunque eso si, con un acordeón presente durante los cuarenta minutos que duró su actuación, pero que no vimos…
Gran actuación de ARKONA pese al sonido que aún estaba por mejorar a tan tempranas horas.
Texto: Jero García
Fotos: Alex Márquez
THYRANT
Tras disfrutar de apenas cuatro temas de ARKONA, a los que no había visto aún en vivo, y me encantaron, por sonido, puesta en escena, actitud, y por la eficacia de sus integrantes, especialmente su vocalista Masha Scream Arhipova, subí por primera vez la cuesta para llegar al Castillo Sohail, donde la anterior noche tocaron WARDRUNA, con gran asistencia, y allí me encontré con mi amigo Fran de Málaga, quien me había hablado ya de esta banda malacitana llamada THYRANT.
Estos malagueños me sorprendieron gratamente, suenan muy profesionales, compactos y bien. Practican un death metal feroz, pesado y audaz mezclado con temas doom muy interesante, por algo llamaron la atención del sello internacional Indie Recordings, una compañía independiente fundada en Noruega, que también tiene en su catálogo gente como los propios WARDURNA, 1349, BORKNAGAR o SHINING.
Vestidos de negro, machacaron, a pesar de la poca gente que aún había a tan temprana hora, presentando su reciente What We Left Behind…
Su arranque fue con “Bury Me”, potente, con cierto aire a lo CARCASS, donde demostraron que son fieros un rotundos.
Me encantó la profesionalidad y seriedad y que como banda son muy completos, y suenan muy internacionales, lo que les ensalza.
Me gustaron especialmente Ocram, su vocalista, con una voz ácida y enfadada muy recia y firme y su batería Miguel Vegas.
Presentaron temas del que será su nuevo álbum «Katabasis», que la verdad, sonaron muy bien.
Disfruté del resto de su corta actuación, donde sonaron algunos temas más, muy doom, y asentados y furiosos y potentes, y me retiré a ver al veterano BLAZE BAYLEY en los escenarios principales. Del que nos habla Alfonso Díaz Cazorla a continuación
Texto: Rafa Basa
Fotos: Alvaro Ochoa
BLAZE BAYLEY
Habiendo seguido las descargas de BLAZE BAYLEY en nuestro país desde que dejara de formar parte de la mítica Doncella, creo que el incombustible vocalista de Birmingham se merecía sentir la estima y el reconocimiento por el material que escribió y grabó junto Harris y compañía, aunque seguramente esos dos trabajos marquen el punto más bajo de la longeva trayectoria de IRON MAIDEN. No obstante, lo que nadie puede discutirle al bueno de Blaze es que tuvo el valor y la entereza de colocarse al frente de uno de los nombres más emblemáticos e icónicos del heavy metal durante la segunda mitad de la década de los noventa.
Así que teniendo en cuenta que el show de esta tarde giraría en torno a las composiciones de “The X Factor” y el controvertido “Virtual XI”, Blaze arribaba a la cita en Fuengirola dispuesto a hacer cantar esos temas a un buen numero de incondicionales que no dudaron en desafiar el radiante sol de primera hora de la tarde.
Salió a darlo todo, como en él es habitual, y contando con el respaldo de la solvente banda que le ha acompañado en sus últimas giras, que son ni más ni menos que los chicos de ABSOLVA; y rápidamente conectó con una audiencia que parecía deseosa de volver a corear algunos cortes que hace tiempo que los propios MAIDEN dejaron aparcados. “Lord Of The Flies”, fue la escogida para romper el hielo, dejándonos al incombustible frontman luciendo un amplia sonrisa.
Aunque el paso del tiempo no ha sido especialmente benévolo con un Blaze que ahora está bastante más orondo que en aquellos años, lo cierto es que su voz sigue conservando ese timbre tan particular que hace que te metas de lleno en el tormentoso e inquietante desarrollo del grandilocuente “Sign Of The Cross”, aunque esta tarde sonó bastante más crudo y desgarrador que en su versión de estudio. En cualquier caso, dejando a un lado la pegada y la intensidad que imprimió Blaze al show, lo cierto es que sus compañeros se mostraron a un excelente nivel, especialmente reseñable me pareció el tándem a las seis cuerdas que conformaron los hermanos Appleton en temas como “The Clansman”; que nos dejaba la estampa del frontman dirigiendo los cánticos de un respetable que se lo estaba pasando en grande, pese a que el sonido no acabó de acompañar.
Al igual que ya hiciera en sus últimas visitas, me gustó mucho la forma en la que Blaze se dirigió al respetable, hablando muy despacio y vocalizando muy bien para que todos pudiéramos entender sus presentaciones, tal y como sucedió durante los prolegómenos de “The Angel And The Gambler”, que sonó bastante más ruda y roquera desprendida de sus envolventes teclados. Sin concedernos ni un segundo de tregua y enlazada con el último acorde del tema anterior arrancaba otra de las imprescindibles de su etapa al frente de la doncella, una celebradísima “Man On The Edge”, que dejó paso a la vertiginosa “Futureal”, que ponía al personal a saltar intensamente mientras el vocalista alzaba sus brazos al aire para hacernos gritar una y otra vez.
Lamentablemente el tiempo de Blaze y sus muchachos estaba ya prácticamente finiquitado, pero antes de despedirse definitivamente, el incombustible frontman todavía tuvo tiempo de presentarnos a sus acompañantes antes de dar por concluida su presentación haciendo sus pinitos en castellano con “Como Estáis Amigos”, tras el que se marchó acompañado de una rotunda ovación.
Seguramente será difícil que podamos ver a Blaze disfrutar del apoyo de las grandes audiencias cuando vuelva a la carretera para presentar sus propias composiciones, pero lo que nadie puede negarle es la tozudez, la constancia y trabajo de un tipo que, dejando gustos personales a un lado, es todo corazón y actitud.
Texto: Alfonso Díaz
Fotos: Alvaro Ochoa
THE BROKEN HORIZON
Los pamplonicas THE BROKEN HORIZON serían la segunda banda estatal en pisar el escenario del Castillo de Sohail, justo después de los malagueños THYRANT. Los de Navarra con su Death-Metalcore con pizcas dubstep se dejaron literalmente la piel sobre el escenario, y algunos como su guitarrista Odei, casi la cabeza, ya que la estructura que soportaba la lona negra con el logo de la banda se le cayó en la cabeza debido al fuerte viento que soplaba, teniendo que ser ayudado por el personal del escenario y hasta por cámaras que estaban grabando la actuación, algo sin importancia y que no empañó su magnífica actuación.
THE BROKEN HORIZON liderados por su nuevo vocalista Víctor, quien disfrazado del mismo Jesucristo no dejó de saltar, correr, dejarse la piel sobre el escenario e incluso saltar inconscientemente hacia el escaso público que había en las primeras filas, presentaban Desolation editado bajo el sello valenciano Art Gates Records.
Abrieron con la brutal Oui del mismo trabajo y desde minuto uno, la banda se dejó la piel con todos y cada uno de los temas que compusieron un repertorio que duraría unos cuarenta minutos repletos de mala leche y rabia a raudales. Víctor se erigió como un frontman a tener en cuenta.
Enérgico, provocador y con mucha rabia , ya que varios de sus temas iban dedicados a todos aquellos que, cómo él mismo dijo, han intentando joderles en su camino. Ganado a pulso lo de estar en la primera edición del ROCK THE COAST!
Texto: Jero García
Fotos: Alvaro Ochoa
GRAVEYARD
Tras el ejercicio de nostalgia noventera que supuso la descarga de BLAZE BAYLEY tocaba cambiar de escenario para seguir echando la vista atrás, retrotrayéndonos ahora a las raíces más clásicas y genuinas del rock y la psicodelia de manos de unos viejos conocidos de la audiencia española como son GRAVEYARD. Aunque a priori su particular retro-rock no cuadraba mucho con los gustos de los más metaleros, lo cierto es que el combo sueco supo aprovechar al máximo su exiguo tiempo sobre las tablas.
Con el sol todavía pegando fuerte y con una intensa brisa marítima, que sirvió para hacernos la tarde más amena y agradable, el cuarteto de Goteborg aparecía en escena dispuesto a hacer mover al personal al ritmo potente y contagioso de la inicial “Walk On”. Pese a la rotundidad de su propuesta, lo cierto es que las composiciones de los suecos acabaron pasando bastante desapercibidas entre la audiencia, exceptuando unas animadas primeras filas que se entregaron al máximo con ellos. No obstante, y sobreponiéndose a algunos pequeños contratiempos con el sonido, GRAVEYARD nos ofrecieron una buena representación de “Peace”, rematando la dupla inicial con los rotundos increscendos de “Cold Love”.
Pero no todo iba a ser contundencia y áspera rugosidad sonora, ya que fue durante “Hisingen Blues”, la pieza que presta título a su segundo esfuerzo, cuando el cuarteto dejó fluir su vena más psicodélica. Aunque la propuesta de la banda que lidera Joakim Nilsson sin duda hubiera lucido bastante más a una hora más tardía, lo cierto es que la ambientación idílica y la fantástica vista del mar tras los escenarios hizo que “Uncomfortably Numb”, se convirtiera en la excusa perfecta para que las primeras filas empezaran a agitar los brazos, convirtiendo ese momento en uno de los más vibrantes de su presentación.
Tras haber repasado parte del material que grabaron para su segunda obra que data de 2011 tocaba volver a centrar nuestro objetivo en la actualidad, recurriendo para ello a los desarrollos stoner del implacable “Please Don´t”, que mantenía el nivel de euforia de las primeras filas gracias a la potencia de sus potentes increscendos. Y es que el show de GRAVEYARD fue como meterse en una máquina del tiempo, y no lo digo únicamente por las sonoridades añejas que marcaron piezas como “Ain´t Fit To Live Here”, sino por la propia imagen de los músicos y por las forma de jugar con la melodía y el público durante los compases iniciales de la final “The Siren”. Resumiendo buen show de unos GRAVEYARD que empezaron un tanto dubitativos pero que acabaron conquistando el corazón de algunos “duros” que se atrevieron a desafiar el intenso sol de media tarde para dejarse imbuir de su ambientación retro.
Texto: Alfonso Díaz
Fotos: Alex Márquez
LEO JIMÉNEZ
A la misma hora que tocaban HITTEN en el Castillo, -a los que me fastidió bastante no poder ver-, arrancó la banda de Leo Jiménez, que ya demostraba previamente muchas ganas de tocar en ROCK THE COAST.
Leo ofreció un gran concierto, tras la edición de su reciente álbum “Mesias”, un disco muy variado en la onda que el cantante de Fuenlabrada quiere y desea, lleno de temas para todos los gustos dentro del metal que practica, con una banda que si ya estaba consolidada hace tiempo, la pasada tarde en Fuengirola, devastó literalmente, con un sonido óptimo y un repertorio muy acertado.
No vi el primer tema, “La Era de la individualidad” pero si llegué para disfrutar del resto de su descarga, -primero desde la sombra y luego a pide de escenario-, que continuó con “Con Razón o sin Razón”, el que fue el primer vídeo single de «La Factoría del Contraste». Todo el mundo gozó de su estribillo y de la “cera” que dieron, con un Antonio Pino que sigue siendo un guitarrista técnicamente perfecto, y desde hace tiempo destilar escénicamente actitud y una agresividad que no mostró en los inicios con Jiménez; pero Antonio ha crecido en este y todos los aspectos. Es un fiera al lado de Leo, pletórico esta tarde, cantando y guitarreando, Edu Fernández, imprescindible al bajo, Carlos Expósito, simplemente genial, y el siempre incisivo Rufo Cantero a la otra guitarra.
El público estaba encantado y más cuando llegó “Desde Niño”, tras un más discreto “Misantropía”, con Tanke Rúiz ayudando con su voz. El single de “Animal Solitario” arrasó, sonó con una potencial vil y marcó el punto más álgido de la actuación, con Leo en forma, exultante y su estribillo melódico cantado por el respetable.
“Aún sigo aquí”, la buena versión de NOCTURNAL RITES sonó genial, con Leo cantando muy bien. Me encantó que la metieran en el repertorio, la verdad.
Me llamó la atención que tocaran “Del Amor al Odio”, otro tema de “Animal Solitario”, que si no me equivoco no sonaba en directo desde hace tiempo. Puso un punto de melodía y sosiego, para que Leo mostrara su parte más lírica, y rápidamente arremetieron con un arrasador “Mesias” con Korpa y la banda dando caña a muerte.
Y cerraron con un “Volar” excelso, buenísimo, dejando claro que Leo Jiménez y su banda “son Ley” y tienen muchos argumentos para seguirlo siendo.
Dejaron muchos temas fuera del repertorio. Los festivales son así y el tiempo no da para más, pero aunque me encantaron los temas elegidos si eché en falta alguna canción más del nuevo álbum.
Impresionante Leo Jiménez. Le volveré a disfrutar en RESURRECTION FEST.
Texto: Rafa Basa
Fotos: Alvaro Ochoa
HITTEN
Por diferentes razones un servidor no había tenido todavía ocasión de ver en directo a la actual formación de HITTEN con el vocalista Alexx Panza al frente. Así que su presencia dentro de esta primera edición del ROCK THE COAST se convertiría en la excusa perfecta para poner fin a esta situación. Si los primeros trabajos del combo murciano estuvieron marcados por la calidad de sus composiciones y esas rotundas pinceladas de velocidad speed metalera, en su más reciente entrega “Twist Of Fate”, el quinteto ha ampliado su abanico estilístico para dar rienda suelta a su faceta hard roquera, aunque sin perder esos toques ochenteros que siempre les han caracterizado.
Salieron con las pilas bien cargadas, dispuestos a no hacer prisioneros, y con la consigna clara de mover al personal que prácticamente abarrotaba el recinto del castillo con la infalible pegada de un trallazo incontestable como es “Take It All”, con la que lograban que sus fieles alzaran los puños para acompañar su ganador estribillo. Se les vio sonrientes, confiados, y con la determinación de que había que ganarse a los que todavía no les conocían, así que para captar la atención de estos que mejor que la potente mezcla de velocidad y melodía que nos propusieron en “Final Warning”.
Como era previsible el grueso del repertorio que interpretaron estuvo centrado en las composiciones de su tercer redondo “Twist Of Fate”, que marca el debut en estudio de Alexx. De modo que no quisieron dejarse en el tintero las trepidantes cabalgadas salpicadas de armonías dobladas a lo largo de la propia “Twist Of Fate”, que servía para que muchos nos abandonáramos al headbanging; o el pegadizo single “On The Run”, que se acabó convirtiendo en uno de los puntos álgidos del show.
Para encarar el tramo final de su presentación el quinteto optó por las estructuras más netamente hard roqueras del marchoso y sugerente “In The Heat Of The Night”. Mientras que el epilogo para una descarga que fue claramente de menos a más, y que nos dejó con un muy buen sabor de boca, fue la pieza que prestaba título a su anterior entrega, el trepidante “State Of Shock”.
En definitiva que HITTEN demostraron que mientras algunas bandas internacionales que practican un estilo similar parecen estar perdiendo fuelle, ellos siguen manteniendo la garra, la fuerza y la determinación necesarias para batirse el cobre con quien sea encima de un escenario, ya que calidad, entrega y actitud no les faltan.
Texto: Alfonso Díaz
Fotos: Alex Márquez
WINTERSUN
Mientras BLOODHUNTER descargaban su Death Metal Melódico en el Castillo, en el Main 1 y tras la descarga de los suecos GRAVEYARD, les tocaba el turno a los finlandeses WINTERSUN.
Los formados en Helsinki por Jari Mäenpää ( ENSIFERUM ) están de celebración, ya que su primer y homónimo disco cumple quince años desde su edición en 2004 de la mano del sello alemán Nuclear Blast, y en Fuengirola fuimos afortunados ya que lo interpretaron de cabo a rabo, algo que se repetirá muy pocas veces.
Chocante fue ver a los escandinavos tocar a las cinco y cuarto de la tarde con el sol de cara y el Mar Mediterráneo a sus espaldas mientras desgranaban su primer disco WINTERSUN y sus frías melodías black/power metaleras.
Jari sigue manteniendo su rasgada voz impecable lo mismo que Teemu Mäntysaari a la guitarra solista quien nos deleitó con una clase magistral de virtuosismo a las seis cuerdas, dejándonos atónitos ante su soltura y maestría.
De acuerdo que ni el sol ni el mar son los mejores aliados para WINTERSUN, pero a pesar de las contradicciones supieron salir más que airosos, ejecutando un concierto repleto de melodía, velocidad y epicidad como no se ha visto nunca en la Costa del Sol, y eso es algo que hay que admirar.
Texto: Jero García
Fotos: Alex Márquez
BLOOODHUNTER
Y aunque fue una pena que me perdiera de WINTERSUN, de los que si habla de ellos en su crónica Jero García, me alegró mortalmente ver, por fin, un concierto completo de BLOOODHUNTER a los que tenía muchas ganas de hincarles el diente. Subí al castillo, estuve un rato con la banda previamente a su salida y arrancaron con bastante público que se fue sumando según avanzaba su intervención.
Lo hablaba con algunos colegas, y coincidimos en comentar que si la banda de Diva Satánica y Fenris en su inmediato futuro dan un paso más melódico y comercial, -en el buen sentido-, sin cambiar su estilo, podemos estar ante unos BLOODHUNTER mucho más seguidos y reconocidos. Ahora son una banda de metal extremo, perfecta en ejecución instrumental, -porque la banda es así en disco y en vivo-, y con una vocalista que lo da todo vocalmente y escénicamente es imparable. Lo de Diva es “mucho”, y poco o casi nada tiene que envidiar a las grandes del género, por voz y acción encima del escenario.
El sonido fue excelente, y la puesta escénica exultante… ¿Los temas? Hicieron una buena selección, empezando con “Let the Storm Come.” Y “la tormenta” llegó con el tema de su álbum «The End of Faith», con las guitarras asesinas y técnicas del solista Fenris, un buenísimo G.Starless más rítmico, y los dos integrantes que más me gustaron: el bajista Éadrom que no paró de moverse y darle un punto más a la banda, y el batería Marcelo, simplemente alucinante. La vocalista de origen gallego a quien se rifa todo el mundo para colaborar, se erigió como líder de la formación, y todo giró alrededor de ella.
“Still Standing Up” saltó las alarmas sonoras, con su mezcla de progresivo y death metal delirante y un poco de thrash. La guitarra de Feris sonó bestial.
“Dying Sun” del que en su día grabaron un vídeo clip fue el siguiente en caer. Faltó el payaso, que Diva se pusiera las alas de ángel, pero no faltó la monja, que le dio un plus a la escenificación y pintó con sangre los rostros de todos los integrantes. Con él recordaron su disco homónimo de 2014 lanzado por Suspiria Records en su día.
“Embrance The Dark Light” del que también grabaron vídeo en sus inicios, en aquel entonces con Diva con el pelo rubio, nos siguió poniendo las pilas. Fue cuando Diva recordaba a la fallecida cantante de ASTARTE, Maria “Tristessa” Kolokouri,, quien ella siempre ha reconocido ser una de sus máximas influencias, aparte de Angela Gossow (ex- ARCH ENEMY).
Siguieron con “The Queen Beast” y “All These Souls Shall Serve” con Diva sentada al principio en el centro de la escena, y con la moja esta vez caracterizada de diablesa, acercándose a cada músico al son del atronador tema.
La tralla no cesó ni un instante con “Possessed By Myself”, con las guitaras más melódicas y claras influencias de ARCH ENEMY y un final “Bring Me Horror” del que recientemente lanzaron un vídeo clip grabado en directo.
Pura Dinamita lo de Diva y sus BLOODHUNTER.
Texto: Rafa Basa
Fotos: Alvaro Ochoa
U.D.O.
Hay artistas que son un seguro de vida en cualquier festival, y sin duda el veterano y carismático Udo Dirkschneider es uno de ellos. Tras haber cerrado definitivamente el capítulo Accept en sus giras “Back To The Roots”, el incansable frontman germano está centrando sus directos en sus producciones como U.D.O. Asiduo habitual de nuestros escenarios y festivales el vocalista de Wuppertal posee una nutrida y leal legión de incondicionales, y eso se notó en el fantástico ambiente que presentaba el recinto a la hora prevista para su aparición.
Pese a que seguro que los más veteranos echaron en falta alguno de los himnos que grabó junto a sus ex–compañeros, lo cierto es que U.D.O. cuentan con un extenso catálogo que repasar, siendo su última entrega de estudio “Steelfactory”. Precisamente fueron dos trallazos de su trabajo del pasado año los elegidos para dar el pistoletazo de salida: el potente “Tongue Reaper” y el marchoso “Make The Move”. A diferencia de lo que sucedió en su visita del pasado mes de enero, esta tarde pudimos ver a un Udo bastante más ágil en escena, completamente recuperado de sus problemas en la rodilla.
Aunque como era previsible todas las miradas acabaron recayendo sobre el diminuto vocalista, sus compañeros estuvieron también a un excelente nivel, con el ruso Andrey Smirnov y Dee Dammens encargándose de las guitarras, mientras que de la sección rítmica se hicieron cargo el hijo del propio Udo, Sven, y el bajista Tilen Hudrap, quien ha tenido que cubrir la vacante del fiel escudero del vocalista, Fitty Wienhold.
Otro detalle a destacar fue el variado repertorio que nos propusieron, rescatando temas de gran parte de su discografía, aunque hicieron especial hincapié en las composiciones publicadas en lo que llevamos de siglo XXI. De modo que no faltaron durante los primeros compases del show temas de corte hímnico y estribillos aplastantes como el de “24/7”. La elegida para poner la rabia y la garra netamente heavymetalera fue la siempre efectiva “Mastercutor”. Mientras que el primer guiño a su producción noventera llegó de manos de “Independence Day”.
Como suele ser habitual Udo y sus muchachos imprimieron al show una dinámica aplastante, así que se fueron sucediendo ante la atenta mirada de una audiencia que se mostró de lo más entusiasta y participativa cortes como “Vendetta”, que resume a la perfección la formula compositiva de la banda en estos últimos años, y la novedosa y adictiva “Rising High”.
El momento para que los más veteranos levantaran orgullosos los cuernos al aire llegó con el mítico “Animal House”, de su debut de 1987, mientras que para rematar el show por todo lo alto que mejor que volver a aunar las voces de todos los presentes para corear los estribillos de “Man And Machine”, y el celebrado “They Want War”.
No hubo sorpresas, Udo y sus muchachos llegaron a este ROCK THE COAST dispuestos a cumplir con su trabajo, y lo hicieron de forma sólida y convincente, ofreciéndonos una buena ración del mejor heavy metal europeo.
Texto: Alfonso Díaz
Fotos: Alex Márquez
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